Moda responsable
Para escribir esta nota lo
primero que pienso es en mi estilo de vida y qué estoy haciendo para alargar la
vida útil de mis prendas y no caer en el “exceso” y a su vez en el desperdicio
de ropa. Lo anterior porque para hablar de moda sostenible o responsable es
ideal ser congruente con lo que se escribe y con el ejemplo.
Es de anotar que con este tema
se van a sentir más identificados los millennials
y los de generación z, ya que estos son más conscientes de lo que está pasando en el mundo
y las facturas que está dando el cambio climático, porque es un teme que nos
compete a todos. Para muestra de un botón son todos los fenómenos ambientales
vividos últimamente y quien no se sienta identificado sencillamente vive en
otras latitudes.
Por todo lo anterior cada vez
más los usuarios desean y están dispuestos a pagar por una ropa de buena
calidad, donde esta no solo dure una temporada, sino que su vida útil sea por
muchos meses y, por qué no, por varios años.
Definitivamente, pienso, debemos apostarle a este tipo de procesos
sociales y medios ambientales.
El primero reflejado por las
grandes industrias que le apuestan a procesos textiles no tan destructivos del
medio ambiente como el uso adecuado del agua, es decir, en cuanto a, la disposición
correcta que se le hace de ella en el entorno, de modo que no se perjudiquen los
ríos o cuencas. También se contribuye
con esa responsabilidad social, ambiental y de moda, utilizando fibras textiles
de primera calidad, es decir, que el proceso de esta ayude y contribuya al cuidado de su entorno donde se da. Estas dos meras acciones, entre muchas, determinan
un buen proceso para que una prenda sea sostenible. Insisto, hoy más que nunca se necesitan de
estos procesos, además soy consciente que esto tiene un costo adicional y está
en cada uno de nosotros en acceder a pagar o ser sencillamente indiferente a
esta problemática.
Además yo sé que desde sus
casas y armarios, ustedes puede reinventar esas prendas que tanto ama, sin
necesidad de comprar nuevamente y tirar y es por esto que estos tips son super fáciles
y prácticos y, lo mejor, se trata de materiales que se encuentran en el mercado
local.
- Cambiar los cuellos desgastados
- Agregar detalles a blusas y
jeans que estén viejos, degastados o rotos, como bordados de flores o animales,
que están muy de moda y se pueden encontrar en las distribuidoras de materiales para confección o artesanías.
- Rediseñar esa prenda que tanto
le gusta, cortándole las mangas o agregando esta en otro material o color.
- Y como tip local, en el
barrio Las Sesenta Casas hay una señora con el ya casi en desuso arte de tejer
y lo hace de una manera divina. Ella
puede recuperar prendas que están rotas y vaya manera de hacerlo. De hecho vi un trabajo con unos zapatos en
lona cuyo “parche” tejido parece una obra de arte.
Aquí lo importante es que
usted sea consciente que el mundo necesita de ideas y actitudes que lo ayuden a conservar y qué mejor que ser
responsable con las prendas, evitando en cuanto se pueda esa costumbre de
“comprar y tirar”, actitud que nos ayudará a comprar la ropa que estrictamente
necesitamos. Por todo lo anterior pienso
que de mi parte y espero de ustedes, apostemos siempre por una moda
responsable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario